Sin ninguna duda, podría decirse que este proyecto es un vivero de la innovación de la salud. Health Living Lab es la propuesta del equipo liderado por Luis Alegre, director de Innovación y Proyectos de Son Espases, que bajo sus alas se dedica a impulsar proyectos innovadores que se desarrollan en el complejo hospitalario.

«Es un ecosistema en el que se buscan sinergias entre el conocimiento clínico de los hospitales con empresas privadas y públicas. La idea es que encontremos soluciones conjuntas para salir al mercado», explica Luis Alegre, responsable del proyecto que propone el desarrollo de «soluciones de todo tipo, desde dispositivos médicos a tecnológicos como apps, pruebas de laboratorio, así como soluciones organizativas».

La salud es precisamente protagonista desde que se inició la pandemia y está centrando un buen número de avances innovadores. «La pandemia ha hecho que nos demos cuenta de que necesitamos prepararnos para la adversidad. En estos escenarios desconocidos, la innovación es un buen socio».

Alegre advierte que en este proyecto ya se han puesto en marcha un total de 22 proyectos innovadores en diferentes estadios de desarrollo, ya sean solo en fase de idea o a punto de registrar patentes. «Aparte de este grupo de Health Living Lab, hay detrás mucha gente involucrada en el proyecto», señala.

El laboratorio no es un espacio físico, aunque cuentan con la posibilidad de reunirse en instalaciones de Son Espases. Los 22 proyectos innovan en dispositivos quirúrgicos, transformación digital e inteligencia artificial. Este proyecto está dentro de las previsiones de inversión del Govern y aspira a los fondos europeos de recuperación.

«Con estos médicos llegamos a donde sea, tienen experiencia»

Aurora Villalonga es directora de Banca de Empresas en CaixaBank y con su dilatada experiencia en el mundo financiero y empresarial se ha volcado en la mentoría del equipo Health Living Lab.

Villalonga ha aportado al equipo liderado por Luis Alegre su visión empresarial y su conocimiento en cuanto a organización, financiación y viabilidad. Además, propuesto que este proyecto, que surge de una institución pública, se rija con los mismos criterios de una empresa privada «a la hora de gestionar las iniciativas y solicitarlos, así como al enfocar la viabilidad de los proyectos individuales del laboratorio en términos de rentabilidad y eficiencia a nivel privado».

La experta considera un acierto que se trate de un laboratorio de proyectos que detecta las necesidades que tiene un hospital público y sus pacientes. «Es increíble la dedicación altruista de estos profesionales de la salud hacia Health Living Lab, con la que está cayendo», dijo haciendo referencia a la situación de pandemia que está afrontando el sector sanitario.

Según su opinión, esta iniciativa cuenta además con «unos plazos de retorno de los proyectos individuales muy cortos y una rentabilidad descomunal. Son pequeñas joint ventures de las que pueden nacer empresas que se pueden adherir al tejido empresarial balear y, además, prestan atención a las necesidades reales de salud».

Ya hay un buen número de empresas privadas interesadas en participar en este laboratorio que se comprometen a colaborar en el mismo. «En esta iniciativa, ellos aportan los recursos humanos y la experiencia y se ofrecen a colaborar con empresas privadas que quieran comercializar los productos». La finalidad es conseguir una patente y generar beneficios.

Según Villalonga, en este laboratorio se van a crear proyectos «que saldrán de manera independiente y nutrirán de fondos al propio laboratorio. Tiene una gran capacidad de atracción de empresas internacionales».

«Con estos médicos llegamos a donde sea. Se han entregado a fondo en el proyecto, en el que trabajan desde 2018, aunque con la pandemia se ha acelerado el proceso», añadió Villalonga, que no dudó en alabar con entusiamo al equipo de Health Living Lab. Muchas empresas privadas e instituciones públicas han mostrado su interés en el sector sanitario, por lo que esta iniciativa tiene asegurado el éxito.